No hay tu tía
En algún lado están los terrones de azúcar.
Clic de la felicidad
Happy Happy Joy Joy






jueves, septiembre 30, 2004
Nombres, apodos y cosas que se dicen 
–Vos estás muy equivocado, flaco...– me decía ella, cada vez que yo lograba enojarla, la mayoría de las veces a propósito, pero sin la menor idea de cómo desarmar ese enojo que se hacía cada vez más real y que no tardaba en envolverme a mí también. Cuando me llamaba “flaco”, era el punto de quiebre: flaco se le dice a un desconocido, a alguien que pasa por la calle para pedirle fuego o la hora y, entonces, también al que estaba frente a ella sosteniéndole la mirada.
En esos momentos sus ojos eran enormes, de una enormidad tranquila y murmurante. Y ella me decía flaco con énfasis, proclamando un gran descubrimiento, como si yo hubiera simulado ser Adrián todo el tiempo y, justo ahí, me revelara como un flaco cualquiera de esos que pasan y que, encima, estaba muy equivocado. Varias veces temí que se levantara, desdeñosa, de la mesa de un bar y desapareciera para siempre, así que siempre estaba atento a cualquiera de sus movimientos. Otras, hubiera preferido que se fuera de una vez por todas.
–Con enojarnos no ganamos nada, piba– le explicaba, blandiendo el “piba” como mi única posibilidad de contraataque. Pero entonces, en vez de arreciar en la contienda, ella se ablandaba. Cambiaban las palabras, sonreía. Seguramente, los ojos enormes le murmuraban que, mientras le decía piba, yo mordía otros nombres suyos y había dicho todo eso para perderme en la perfección de su piercing, en la lejanía hermosa de sus gestos de desengaño.

                                                       posteado por Adrián a las 1:43 p. m.



jueves, septiembre 23, 2004
El huevo precede al huevo 
Encuentran huevo de gallina dentro de un huevo de pato
Los habitantes de una aldea en Rumania están deslumbrados por el hallazgo de un viejo granjero: un huevo de gallina dentro de un huevo de pato.
El huevo del pato parecía absolutamente normal, pero en su interior se encontró un huevo de gallina completo, con cáscara y todo.
El granjero octogenario explicó que la culpa de esta situación la podría tener uno de sus gallos, que está ciego. Constantin Zamfir dijo al diario Editie Speciale de Oltenia: "al principio pensé que era un señal de Dios y me asusté, pero enseguida me acordé de mi gallo".
"Últimamente está un poco ciego, pero todavía es el más fuerte de la granja".
Noticia original en Ananova.

Enseñanzas:
* Mensaje de la naturaleza: nunca me conocerán completamente.
* Mensaje del gallo: estoy medio ciego, disculpe.
* Mensaje de Constantin Zamfir:¡Atchíiis! ¿Lo salpiqué? ¿Me da 50 centavos?
* Mensaje del Erudito d'école primaire: ¡es genéticamente imposible!.

Otros (óvolo-gallináceos):
* naTán demuestra que la gallina precede al huevo.
* Una gallina explota en Cuba.

                                                       posteado por Adrián a las 2:54 p. m.



lunes, septiembre 20, 2004
Promedios 
Ahora mismo podría escribir un texto que fuera la expresión promedio de todo lo que he escrito (posteado, para ser más precisos y sinceros) hasta el momento. Para el éxito de este epitafio matemático no necesitaría el auxilio de ninguna inspiración, de modo que la incertidumbre quedaría, por una vez, de lado.
El tremendista aduce:
hay furias artes que no domino
que me tropiezan o me arrodillan
ante ellas mismas grandiosas
como templos del hombre dios

¡No temáis! Repito: no propongo amarrarme a un proyectil poético, sino llevar a cabo un mero juego cuantitativo. Bastaría con desmenuzar los imperfectos pollitos de porcelana presentados hasta ahora y someter sus partes a las leyes de la estadística. Vocales, consonantes, las regularidades del código lenguaje, indicios de mí, a la calculadora.
De la misma forma, otros podrían buscar su propio texto promedio e imprimirlo en una tarjetita brillante. Algunas tarjetas ilustres: no, mejor no...lo interesante es que, de ese mazo de cartones, se podría sacar otro promedio más amplio (¿el de los escribidores mundiales?). Luego, el promedio de la humanidad toda. Supongo que sería una frase del tipo “quiero más mostaza”. Pero habría que hacer la cuenta.

                                                       posteado por Adrián a las 1:23 a. m.



miércoles, septiembre 15, 2004
Ratitas de ayer y hoy 
Heme aquí otra vez, frente a Blogger.com. Ante el mismísimo: el botón [Publish]. Gracias te sean dadas por tu cliquérrima botonez, por la suma de zumos que revuelves. Lo cliqueo o me buttonea, no hay nada que hacerle.
Menos mal que traje algo:
- Una pequeña historia donde un hombrecito y cositas. Los animalitos y las ratitas abundan. Sobre todo las ratitas, que se disparan como trazas blancas o pardas en el espacio de un cuarto, por todos lados, con sus ruitidos nimios, tan minúsculas que el hombrecito teme que le entren por los poros o por las puntas del pelo. Pero él las ha creado.

¿Alguien vio las ratitas de Clorindo Testa? Las conocí en una exposición que terminó hace como cinco años. Lástima que en Internet no se consiguen. Me reí tanto aquella vez, porque eran para reírse, aunque en el museo nadie se reía. Putos esnobs.
Claro, me olvidaba que todo eso fue en siglo XX. Por ahí me equivoco...

Un sitio web grosso: Veterinario Online.

Consulta: Quiero saber que puede tener mi hamster y como lo curo, ayer cuando lo cargaba se cayo de mis manos a una altura considerable de cabeza, primero se desmayo, luego volvio pero quedo mal, esta debil, tiembla todo el tiempo, su corazon se le ve muy agitado, y no abre los ojos, el tiene aproximadamente 1 año 7 meses. Ah y es un hamster miniatura.
Veterinario Online: Debes darle un antiinflamatorio y ponerle hielo en la cabeza, o llevarlo al veterinario. Te aviso que los hámster viven solo dos años.


Consulta: ¿Por que el bebedero del hamster siempre tienen que ser de los que se cuelgan al revés con un pico metálico?
Veterinario Online: El bebedero que cuelga con pico metálico, es el bebedero de elección para los hámster, es mucho mas limpio, no mojan la jaula y están acostumbrados a ese.


Así que el hamster elige. Elige la succión. De la misma forma, miles de chicos eligen la carrera de contador o comunicador social...para no mojar la jaula. Ojo, yo también.

Consulta: ¿como puedo saber la edad de mi hamster?
Veterinario Online: No es posible saber la edad de un Hamster, pero ellos viven solamente 2 años.


Todo indica que el hamster es un animal muy cronométrico. Reservado en su vida (porque "no es posible saber"), pero infalible en su caducidad. Cuando se te muere, le festejás el cumpleaños número dos, que cae justo ese día.
No es que me interesen este tipo de animales -nunca tendría uno-, pero no veo ninguna razón para escribir sobre gatos, como tampoco creo en los dinosaurios, los animales del África y esas cosas. Ah, me olvidaba, durante estos años he sido un fan secreto de Bielsa. Acabo de enterarme.

                                                       posteado por Adrián a las 2:30 p. m.



viernes, septiembre 10, 2004
Acerca de la ceniza y su cigarrez 
Ahora estoy fumando más. Pero lo tengo dominado. Al cigarrillo, digo. No soy adicto: el placer de fumar, nada más. Pero estoy fumando más, lo sé, ahora.
A veces pasan cosas raras. Por ejemplo, un cigarrillo de la mañana sostenía una ceniza en forma de castillito. No es que a mí me guste la palabra castillito y le quiera otorgar el puesto en la oración anterior por acomodo, ni que la ceniza fuera sólo un indicio borroneado, una intención, de un castillito. Realmente tenía la forma de un castillito ¡sino no lo diría!
No soy un adicto que necesite inventar cosas.
Resulta que yo estaba ahí, parado en una esquina, con mi cigarrillo dominado, examinando de cerca su corona de cenizas medievales, cuando sentí ganas de fumar más. Entonces, la disyuntiva: si me lo llevaba a la boca para pitar, se caía el castillito perfecto; sino lo hacía, se acrecentaban mis ganas de fumar más.
Mantener la verticalidad del castillo era lo principal. Las ganas de fumar podían esperar, porque, se sabe, lo tengo bajo control. Pero, al ver tantos puchos muertos, tirados al pisoteo en la esquina, entendí lo vano del esfuerzo y lo fatal del desenlace. Cuántos habrían pasado por esto antes.
Me lo comí. Mi castillito tenía un gusto que se deshacía áspero, que se confundía con la quemazón de la lengua. Respiré y, con los ojos acuosos, me prendí otro cigarrillo antes de llegar al trabajo.

                                                       posteado por Adrián a las 2:16 p. m.



martes, septiembre 07, 2004
Caretas, automatismos, mal café, etc. 
Z y M salen de la oficina. La máquina de café está en un área neutral, donde convergen puertas, escaleras y personas. Por el ojo vidriado de una de esas puertas se asoma X. M le retribuye una sonrisa y le guiña un ojo como ella sabe hacerlo. Un disparo perfecto y conocido de sus pupilas delicadas.
El inesperado acontecer de las miradas dificulta la decisión de Z ¿Café cortado o solo? M se le acerca y, confidente, le suelta: "ese tipo es lo más falso que hay..." Ambos quisieran café de verdad. Hubieran pedido.
Z se entretiene contando centavos mientras trata de evitar que M empiece el relato de los acontecimientos de su vida y viceversa. Al final: café corto o café largo; café, a secas, no hay. Monedas, luces, un dedo que elige. Ruidos.
El líquido vulgar se acrecienta en un vaso de plástico.

                                                       posteado por Adrián a las 1:22 p. m.



jueves, septiembre 02, 2004
Otras ciudades 
Si viviera en otra ciudad, tal vez en la tuya, con gusto diría: el día atardece brisa de uvas. Y sería una mentira muy feliz, que me sorprendería varias veces al día.
Pero en mi ciudad, ¿qué digo? ¿cómo hago para esquivar los autos y los equipajes descarrilados del mediodía?
Lo intenté, te lo juro. Ni lo voy a intentar...
Me di contra el peso de mi lengua de tanto querer pájaros sin humo; aunque pedí, el soplo de los jardines nunca me derritió el reloj.

Los motores se tragan una riña de edificios. Eso digo.

                                                       posteado por Adrián a las 1:04 p. m.



miércoles, septiembre 01, 2004
Cancioncita 
esta mañana el cielo se vidriaba de rayos azules claros
como el sol nunca como tus ojos siempre pensé y te supe
desmayando sombras en tu andar buscándote en tu cavilar de luz
pintabas cálidas las ciudades que te envuelven fuera y dentro de mí

                                                       posteado por Adrián a las 12:03 a. m.